Porque esta gran humanidad ha dicho ¡basta! y ha echado a andar.
Y su marcha de gigantes ya no se detendrá hasta conquistar la verdadera independencia,
por la que ya han muerto más de una vez.
Ernesto ´Che´Guevara
Nosotros, Jóvenes Patriotas, quienes hoy seguimos construyendo la educación para la Segunda y Definitiva Independencia, nos llenamos de profundo dolor rebelde por la muerte de un cercano compañero. Desde la Federación de Estudiantes Universitarios, somos conscientes de que plantearnos un nuevo modelo educativo demanda concebir un país distinto, donde justamente sale a la luz el derecho a la vivienda, a la ciudad y, en general, el derecho a la vida digna del pueblo colombiano.
En ese sentido, reconocemos toda una vida de lucha que entregó el compañero Mario Upegui, constituida ésta, hasta la saciedad, por defender los derechos de los excluidos, de los que nunca habían tenido techo y lo consiguieron, no por la caridad, el miedo o el ilusorio altruismo que motiva a emprender dichas políticas desde el establecimiento, sino como resultado de grandes luchas de hombres, mujeres y niños, que desde la experiencia comunitaria y la organización social y política pudieron construir ciudad desde sus necesidades, oponiéndose a los espacios propios del capital y librando batallas que costaron la vida de centenares de valientes.
Hemos dicho: se fue un sobreviviente. Desde la Federación y la Marcha Patriótica nos reconocemos como hijos de la Unión Patriótica y despedimos a su Presidente, quien tuvo que enterrar a un sinnúmero de silenciados por las balas; todas y cada una disparadas por quienes hicieron hacer sonar estrepitosamente sus armas para pretender pasar inadvertidos los gritos de los hijos que más amaron esta Patria, dejando huérfana a una generación completa que reconoce claramente su lugar. La Colombia de hoy es la que el compañero Mario quiso transformar, justamente porque quienes detentan el poder, consolidando la economía de la acumulación por medio del despojo, lo hacen con toda la benevolencia propia de su clase, haciendo más que necesaria la unidad de todos aquellos que soñamos vivir otro estado de cosas, de quienes creemos que aquello se puede y se debe cimentar sobre la construcción popular, donde resulta urgente la solución del conflicto social y armado que afronta el país, entendiendo que el panorama agrario, urbano, económico, social y político se debe plantear desde los más, desde quienes históricamente hemos sido relegados a meros espectadores de la grotesca repartición entre los menos, dando como resultado la posibilidad de construir lo hasta ahora despreciado.
El compañero Mario nos recuerda, junto con las y los otros que ya no están entre nosotros, la importancia de luchar por otro país generando organización desde las bases, trascendiendo toda situación problemática hacia lo político, siempre con el horizonte claro y marcando el ritmo para construir la Patria que demanda nuestra gente, recordando siempre que las personas pasan y sus ideas, sus peleas y los triunfos de generaciones enteras quedan.
Hasta siempre, Mario: ¡Aquí estamos tus Jóvenes Patriotas!
Fuente: FEU Colombia
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